Conducir una furgoneta es completamente distinto a un coche, y en este artículo te vamos a explicar por qué.

Consideraciones a tener en cuenta para conducir una furgoneta

Desde el verano de 2018, la Dirección General de Tráfico viene estableciendo una serie de controles de vigilancia en carreteras para furgonetas. El organismo del Ministerio del Interior se ha propuesto acabar con la siniestralidad. Y para ello ha puesto en su punto de mira entre otros a estos vehículos. Esto se debe a que presentan características diferentes a los turismos aunque exijan el mismo permiso tipo B.

Diferencias entre conducir una furgoneta y un turismo

Aunque ambos vehículos sean parecidos, en realidad no tienen nada que ver a la hora de ponerse al volante de los mismos. Por tanto, la conducción también cambia considerablemente. Las diferencias son muchas y te las explicamos a continuación.

Velocidad

Para empezar, las furgonetas han de atenerse a unos límites diferentes. Tal y como establece el artículo 48 del Reglamento de Circulación, en autovías y autopistas no podrán superar el límite de 90 kilómetros por hora, los 80 cuando se trate de vías convencionales con un metro y medio de arcén y los 70 kilómetros por hora en el resto de vías fuera de poblado.

Peso y dimensiones

Suele ser entre dos y tres veces mayor que el de los turismos. También suelen ser vehículos más altos y, por lo tanto, más inestables y sensibles a los vientos laterales. Por lo tanto, se ha de poner en práctica una conducción si cabe más responsable.

Carga

Las furgonetas suelen emplearse para trasladar mercancías. Por su fisonomía, es fundamental una correcta distribución y una adecuada sujeción para evitar accidentes. La carga de mayor peso ha de colocarse sobre la plataforma interior, entre ejes.

Distancia de seguridad

Debe ser mayor respecto a la que deben mantener los automóviles convencionales. Además se debe incrementar cuanto más masa tenga el furgón. Esto es debido a que la capacidad de maniobra que ofrecen estos vehículos es menor.

Normativa por la que se rigen

Al no afectarles la normativa de vehículos pesados de transporte de mercancías, las furgonetas no tienen por qué llevar tacógrafo ni limitador de velocidad. Sin embargo, esto no quita ni un ápice de la importancia de practicar una conducción responsable. Establece las paradas correspondientes cada cierto número de horas y ve con cuidado.

Otros consejos para quienes opten por el alquiler de furgonetas en Barcelona

Como se ha apuntado, el principal uso que se da a estos vehículos es de transporte de mercancías. Por lo tanto, se emplean mucho principalmente en mudanzas o repartos. El servicio de alquiler de furgonetas en Barcelona es muy demandado, como el que ofrecemos en Área Alquiler.

En nuestro caso garantizamos un adecuado mantenimiento de la flota, para que los clientes disfruten de vehículos seguros y adaptados a la norma. Una práctica que resulta fundamental. Las furgonetas son vehículos con características particulares y requieren un control exhaustivo, por lo que otra de las consideraciones importantes para ponerse al volante es superar las correspondientes revisiones periódicas.

Conducir una furgoneta se diferencia de hacerlo con un coche normal y corriente. Conocer y poner en práctica lo que dicta la normativa es esencial para aumentar la seguridad en la carretera. En Área Alquiler ponemos a tu disposición una flota de furgonetas a punto para ti cuando las necesites. ¡Llámanos y resolveremos todas tus dudas!