Aunque nunca hayamos oído hablar de la ira al volante, todos hemos sido su víctima, directa o colateral, en alguna ocasión. Se trata de un peligrosísimo compañero de viaje, tanto para quien la padece como para cuantos se cruzan con él cuando maneja un volante.

Este artículo permite identificar esta circunstancia de riesgo y los mecanismos para prevenirla, evitarla y saber reaccionar cuando la detectamos. ¿Iniciamos este viaje por las emociones de los conductores agresivos?

¿A qué se llama ira al volante y por qué se produce?  

La ira al conducir puede afectar a cualquier conductor. Conocer sus causas y sus manifestaciones, así como sus potenciales peligros, permite establecer estrategias efectivas para afrontar y controlar su desbocada presencia y favorecer la seguridad vial.

La podemos definir como una intensa emoción de enfado o furia que experimentan algunos conductores mientras están al volante. Es una respuesta negativa que surge ante distintos detonantes o motivos, entre ellos:

• Tráfico congestionado y atascos.
• Conducción agresiva, incumplimiento de las normas de tráfico o errores de otros pilotos.
• Falta de civismo vial.
• Ausencia de cortesía en los demás conductores.
• Impaciencia y retrasos en el desplazamiento. 
• Estrés y problemas personales. 

¿Cómo se manifiesta la ira del conductor?

Las personas que experimentan este estado iracundo mientras conducen sienten ciertas manifestaciones físicas y emocionales, especialmente un aumento de la presión arterial, palpitaciones, tendencia a los gritos y expresividad violenta. Básicamente, sienten frustración, enojo y agresividad irrefrenables.

Habitualmente, se producen comportamientos peligrosos en la carretera, como exceso de velocidad, adelantamientos temerarios o enfrentamientos con otros conductores. 

Por ello, conducir en esta situación resulta peligroso para todos. De hecho, las páginas oficiales de la DGT solicitan una actitud al volante completamente opuesta. Así, es esencial aprender a reconocer y controlar esta emoción negativa para evitar accidentes y promover una conducción segura. 

¿Cómo frenar la ira al volante?  

Entre las graves consecuencias que se derivan de ella, figuran las siguientes:

• Accidentes viales, con sus siempre imprevisibles consecuencias.
• Conflictos y estallidos de violencia. Las confrontaciones físicas y verbales son un peligro cierto para la integridad de sus protagonistas.
• Ambiente hostil y peligroso en las carreteras.
• Alteraciones de la salud mental generadas por las tensiones emocionales vividas. Sobre todo, ansiedad y estrés.
• Sanciones legales por incumplir las normas viales. Es decir, multas y posibles pérdidas de puntos en el carné de conducir.

Por todo ello, resulta crucial abordar y controlar este estado al conducir para evitar estas funestas consecuencias. Ahora bien, ¿cómo frenar la ira al volante?

Principales estrategias para prevenir o frenar la ira del conductor 

Tanto si conducimos una furgoneta de alquiler como cualquier otro vehículo, hemos de ser capaces de desactivar o impedir la aparición de este perturbador estado emocional.

Estos son los mejores mecanismos existentes:

1. Familiarizarse con las propias emociones y aprender a reconocerlas. Así, en cuanto apreciemos síntomas de alerta, trataremos de canalizarlas positivamente.
2. Ejercitar la paciencia. Es cuestión de hábito aceptar la realidad vial como viene, aunque la respiración diafragmática nos ayudará a relajarnos.
3. Mantener la distancia de seguridad entre vehículos.
4. Practicar la respuesta cero ante provocaciones. Consiste en ignorar los gestos, los desplantes y las amenazas de los otros.
5. Escuchar música, podcasts o programas de radio que nos calman.
6. Planificar cada desplazamiento y salir con tiempo suficiente.

La ira al volante es un problema grave que suele tener consecuencias desastrosas en las carreteras. Por ello, resulta fundamental comprender sus causas y aplicar estrategias efectivas para afrontarla. Disponer de vehículos cómodos, funcionales y en perfecto estado también es un gran apoyo. Por eso, en Área-Alquiler ofrecemos los mejores. ¡Solicita tu presupuesto sin compromiso!