Camiones
¿Por qué alquilar un camión?
Alquilar un camión puede ser uno de los recursos más socorridos para empresas o particulares de todo tipo. Desde una mudanza bastante grande hasta el envío de mercancías o productos de forma puntual, son muchas las situaciones en las que se va a necesitar contar con un gran medio de transporte. Por eso, queremos analizar algo más de cerca esta cuestión, para entender cuándo resulta más útil y cómo llevarlo a cabo.
Cuando alquilar un camión es la solución
Alquilar permite ampliar la flota de reparto de manera puntual. Es decir: por un breve espacio de tiempo se tendrá la opción de ampliar el número de pedidos o de envíos que se vayan a realizar.
Por lo general, los grandes traslados son los que más necesitan de este tipo de opciones. Y estos se pueden dar en diversos contextos. Por ejemplo, en fechas de mayor actividad, como el Black Friday, cuando el consumo medio se dispara y pasa a ser imprescindible contar con una forma de hacer reparto y envío de productos.
Esta opción es perfecta para quienes no hayan integrado un incremento sostenible en su estructura de facturación, pero sí hayan detectado picos puntuales a los que tienen que dar respuesta. Para contextos así, la respuesta está en alquilar.
¿Qué obtienen los emprendedores y las empresas al alquilar camiones?
Vamos ahora a analizar las ventajas del alquiler por encima de otro tipo de soluciones, como pueden ser la compra o la externalización del servicio.
- Seguridad. Es una forma muy interesante de mantener en todo momento el control de la operación que se esté llevando a cabo. Así, todo el proceso será más seguro y se podrá hacer frente en tiempo real a cuantos imprevistos surjan. Es un buen método para que las pymes puedan dar respuesta a los problemas habituales de la logística.
- Un vehículo en perfectas condiciones. Al alquilar, uno lo que está contratando es el uso temporal de un camión en perfecto estado. Por lo tanto, no tendrá que preocuparse por su mantenimiento o por el paso de los años sobre el vehículo, como sí sucede cuando se compra dicho camión. Esta es una ventaja muy útil cuando una empresa o un particular no tiene tiempo ni recursos para invertir en su mantenimiento.
- Se adapta a los requisitos del demandante. Ya sea en tamaño, tiempo de uso o posibilidades de transporte. Contar con una flota en propiedad, al final, limita las opciones, y no se puede sobrepasar algunos límites. Sin embargo, al alquilar siempre se paga por lo que se usa, ni más ni menos. Esto también ayuda a que las cuentas de la empresa sean mucho más claras y sencillas de manejar.
En definitiva, el hecho de alquilar un camión es muy práctico en aquellos momentos en los que el coste del transporte pase a ser inasumible para la flota habitual. No compromete el presupuesto de una empresa, ya que se adapta a sus necesidades puntuales de reparto. Por eso, nosotros ofrecemos este servicio a particulares y pymes. Contacta con nosotros para ampliar la información.